jueves, 13 de junio de 2013

Carta de agradecimiento

En el reino de los cobardes me hiciste querer ser un valiente.

Sin que tú te dieras cuenta, cada día intenté ser mejor persona. Luché por convertirme en alguien mejor, por merecer todo lo que ofreces a los demás, por despertar una sonrisa en tu rostro y dormir las lágrimas que derramo al saber que no estás cerca.

El tiempo fue testigo de mis esfuerzos por tenerte, de mi lucha contra el olvido intentando abrirme espacio en tu mente, muriendo ante la idea de un futuro en el que no te encuentre, ante la obra de teatro que vivo sin sentido sabiendo que tú no la protagonizas.

Pero cada intento de conseguirte me llovió en mil fracasos, cada beso que no te di floreció en mil puñales, cada "te quiero" que no me atreví a decir desafinó mi alma, y en la primavera de tu ausencia sólo espero dejar de temblar algún día, superar mis miedos, dejar de ocultarme y demostrarte que siempre fuiste el sol que calentó mis días.

Sin embargo, el miedo a tu rechazo se apodera de mí. Si no te tengo cerca no sé caminar, no quiero moverme si eso hace que me arriesgue a perderte, y, si mis pasos no se dirigen a ti, no tendrá sentido seguir caminando.

Por eso, ahora sólo puedo esperar, derramarme en estos textos que intento que comprendas, entregar mi alma en cada letra y hacerte ver que te pertenece, que nací para buscarte, que viví para quererte y que moriré por encontrarte, por lograr que algún día te quedes y los amaneceres dejen de desnudar un alma que se vació hace tiempo, que siempre quiso vivir para beber de ti.

Por último, sólo puedo despedirme dándote las gracias, mostrándome complacido ante la idea de tu existencia. Ten en cuenta que este agradecimiento es sincero. Siempre dolerá no tenerte, pero nadie escoge lo que siente, y yo no puedo obligarte a buscarme cuando no quieres que yo te encuentre. De todos modos, debo darte las gracias por todo, por enseñarme que la vida es un camino de rosas y puñales y porque, aunque no lo sepas, siempre fuiste un motivo para intentar ser mejor persona.

Te querré hasta que un deshielo derrita nuestros cielos.

Gracias por todo, tu desamor me ha hecho más fuerte.

Flautista


1 comentario:

Ícaro

Cuanto más cerca del Sol logro volar, mayor es el impacto de mi caída. Puede que sea mi osadía la que tenga que lamentar mientras me ha...